Recientemente vi este video y me pareció súper interesante. Los que me conocen saben que siempre estuve involucrado en discusiones con profesores, autoridades de las universidades y colegios a los que fui, tratando de entender de que se trataban los días que experimentaba en estos lugares tan aclamados donde tenemos que dejar de ser enteramente lo que somos. 

Jamás fui un marginado de estas instituciones por lo contrario siempre tuve cierta reputación académica y supe ganar un respeto especial de algunos. Aunque siempre tuve una tendencia en apuntar lo anticuado de estos sistemas, mi interés por las temáticas que no se discutían en los colegios o instituciones acerca de nosotros mismos eran cosas que yo creía que formaban parte de mi y recién tuvieron sentido cuando revele por accidente que podía recrear sonidos a través del piano, que fue donde descubrí adonde estaba la verdadera fuente de nuestras extraordinarias capacidades como personas.

Este video no dice verdades nuevas o revolucionarias ni tampoco ocultas de nuestras vidas; ciertamente menos para los que peleamos por mantener ideales y partes intactas de nosotros mismos, pero lo interesante de este señor que nos habla en el video es que lo hace de una manera sorprendente, su conferencia es como una clase de baile donde maneja los pasos con mucha precisión y logra oportunamente dejar mensajes  muy profundos que sacuden la mente del público.

La sabiduría y el gozo que descubrí en la música, el deporte y mis vivencias en paralelo con lo demás son invaluables  y han cambiando mi manera de pensar continuamente y son mi verdadera fuente de esperanza en lo que hago todos los días y en especial mi futuro.